Friday, September 30, 2005

Pepo, rulo y ñoco.

Coño, qué miran los millones de ojos de las moscas de Satre, estacionadas verticalmente en el vidrio de la oficina. Habrá un emperador, un bicho impostor de Kafka, asediador de las masas con su mensaje de terror. Toda guerra trae cobardes en trajes fino de arañas, desorden ante la calma de la complacencia. Todo soldado doma el vuelo de luciérnaga, gris se colora el cielo desde el punto de la avispa. Mete el rulimán en el ñoco, después del pepo y rulo. Juego de canicas.

Reo Del Cigarrillo Julio 20, 2004